
Seguramente si usted ve a Felipe García Martínez caminado por la calle, haciendo clases, o descansado en su hogar, lo verá leyendo, o al menos con un libro bajo el brazo, y ese libro, no precisamente será de psicología, podría ser de las más distintas disciplinas. Y es que su amor por la lectura es algo inherente.
Libros como El último grumete de la Baquedano en su infancia o las obras de Hermann Hesse en su adolescencia forjarían su camino cuando a los diecisiete años de edad ingresó a la Universidad de Concepción a estudiar psicología, siendo aún un guardián entre el centeno.
Precisamente, en su primer año de universidad comenzó en ciernes a escribir cuentos y ensayos, aunque el oficio de escribir ya lo llevaba en el cuerpo. La tradición familiar por la lectura y la escritura eran el telón de fondo. Su padre era profesor de literatura y músico y su abuelo, además de marino poseía una gran biblioteca y le gustaba escribir.
En el año 2009 publicó su primer artículo científico en la revista Ciencia y Enfermería de la Universidad de Concepción que trataba sobre el Burnout en un hospital psiquiátrico, y desde ese momento no ha parado.
Actualmente Felipe García, ha sido reconocido recientemente en un artículo como uno de los grandes productores de la investigación en psicología en Chile y ocupa el primer lugar en el liderazgo de investigación: “Al segmentar el liderazgo investigativo (primera autoría o autor de correspondencia) destaca la participación de Felipe García, quien lidera el 64% de sus contribuciones”, sostuvo Yerko Uribe-Bahamondes, en el artículo “Investigación chilena en psicología: una mirada desde WoS (1976-2020)”, publicado este año en la Revista de Historia de la Psicología.
- ¿Cómo partió todo esto de ser investigador y publicar artículos?
“En general en este tipo de oficios, uno se hace preguntas, por ejemplo: ¿Servirá este tipo de terapia para la depresión? O ¿estará relacionado esta consecuencia postraumática con una experiencia negativa en la infancia? Son preguntas que uno se formula. Para eso se indaga información bibliográfica, encontramos la respuesta y con eso nos quedamos. El tema es cuando tú te haces preguntas que no tienen respuesta y ahí es donde nace el interés por investigar científicamente, es decir, como no hay respuesta para esta pregunta, entonces la busco yo, porque considero relevante responderla, eso me llevó a enfocarme a las distintas estrategias de afrontamiento frente a un evento altamente estresante, por ejemplo y como esto conlleva a que las personas desarrollen distintas consecuencias”.
2. ¿Qué sintió mientras publicaba su primer artículo?
“Debo aclarar que, uno no escribe un artículo solo, se trabaja en equipo. Ahora cuando escribes el resultado de un estudio, te podría decir-tranquilamente-que siento satisfacción, porque en lo personal, siento que uno está entregando algo que puede ser importante para otra persona, ya sean profesionales que trabajan con el tema o usuarios”.
3. ¿Por qué escribe artículos? ¿Qué lo motiva?
“Me motivan dos cosas; lo principal para mi es contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de las personas, y, si yo logro determinar algunos factores que contribuyen a que se sientan más bien o, más mal, puedo proponer estrategias que pueden modificar aquello. Lo segundo es contribuir al conocimiento”.
4. ¿Piensa algún día dejar de investigar y publicar?
“No, no pienso dejar de hacerlo, porque creo que esto es en parte lo que para mí constituye mi sentido como profesional; el entender cosas, el averiguar cosas y darlas a conocer. Ahora estoy liderando un proyecto Fondecyt, lo que implica estar investigando todo el tiempo, y por ello, puede que baje la intensidad con la que investigo más adelante, pero no que desaparezca”.
5. ¿Cómo lo hace? Investigar, escribir, trabajar y tener una vida personal.
“Siento que tengo ciertas cualidades que me ayudan mucho a hacerlo, soy una persona muy organizada, por lo tanto, tengo tiempo para todo; para la familia, para escribir, para trabajar, etc. Asimismo, tiendo a concentrarme mucho cuando realizo una actividad. Además, como te decía anteriormente, es un trabajo en equipo, no es que yo esté haciendo solo la investigación o la escritura”.
6. ¿Cómo es usted en su faceta de investigador?
“Como investigador siento que soy una persona bien disciplinada, rigurosa, proactiva y creativa”.
7. ¿Por qué se interesó en ahondar en el estrés postraumático y traumas?
“Por dos razones, ambas clínicas. Primero, por el tipo de consultante que me llegaba, quien generalmente había enfrentado una situación de crisis importante. Y segundo, porque quería comprobar si la terapia que yo practicaba, efectivamente servía a alguien que haya vivido una experiencia grave”.
8. ¿Qué le falta a la psicología actual?
“Hay mucho que no sabemos en psicología, hay un área tremendamente inexplorada y que, además tiene límites, los limites que tenemos respecto a cómo abordar algo en el ámbito de investigación se debe a la naturaleza más bien subjetiva del fenómeno psicológico; en cuanto se generen herramientas más objetivas, si es que es posible, por ejemplo, a través de la neurociencia, probablemente la investigación se seguirá ampliando”.